top of page

COMUNICADORES CON PELOTAS DE ACERO #6 | César Fuentes Rodríguez

  • Foto del escritor: China Nw
    China Nw
  • 2 jul 2020
  • 6 Min. de lectura

César Fuentes, filósofo y escritor. Referente del periodismo del metal nacional. A continuación, un paso por su tremenda y reconocida trayectoria.

ree

Tus inicios...

"...Empecé a escribir de chico, cuentos y proyectos de novelas, pero casi no publiqué nada. Pasé de la literatura al periodismo porque quería escribir sobre la música que me gustaba, llámese rock and roll, heavy metal o rock con mayúsculas y a secas. Eso habrá sido por el '82, cuando hacía unas columnas para un fanzine de la Facultad. Tiempo después pedían redactores para una revista especializada llamada Riff Raff y ahí empecé a publicar regularmente. Un tiempo después de que la revista desapareciera, se me ocurrió la complicada idea de crear y costear Madhouse y poco a poco vino todo lo demás. Casi siempre me desarrollé en medios independientes o en proyectos que yo mismo monté..."

EPOPEYA Y MADHOUSE

"...De esas dos revistas fui fundador, creador, director, redactor, corrector... casi todo menos fotógrafo. Madhouse empezó como una revista de amigos, donde todos los que participaban tenían voz y voto por igual. No había intención de encasillarse en un estilo. La idea era cubrir todo el espectro de la música pesada, y eso incluía algo de punk y de progresivo, lo mismo que las nuevas tendencias que fueran surgiendo, aunque teniendo siempre al Metal como base. Convoqué a la gente que conocía de la Riff Raff, con la que siempre hablábamos de hacer algo, y tomé la decisión por pura calentura. El comienzo fue un desastre. Nos agarró la hiperinflación de 1989 y el dinero de los primeros tres números se perdió por completo, incluso después yo seguí soportando las pérdidas durante mucho tiempo. Creo que lo original fue que dejamos de copiar el material de las revistas de afuera y nos decidimos a producir todo nosotros. La verdad es que yo no veía motivos para seguir copiando artículos de revistas extranjeras cuando se podían hacer en casa y con un nivel que no tenía nada que envidiar. Al principio algunos me decían que estaba loco pero luego, de a poco, se dieron cuenta de que ése era el único camino posible, entrevistar a las bandas directamente y unir los testimonios a las conclusiones. Hoy quizás parece una tontería, pero en aquel momento nadie se animaba a hacerlo. Gastamos un montón de plata en correo y llamadas internacionales y nos llevaba un tiempo enorme desgrabar las entrevistas mientras los demás seguían copiando sin esfuerzo, pero al final creo que valió la pena en el sentido de que fuimos una buena influencia, todo fanzine o revista que se hizo después tuvo que intentar ponerse a nuestra altura para continuar funcionando. En cuanto a Epopeya, fue la revista más íntegra y satisfactoria que hice. Por un lado teníamos el arreglo con Nems que nos permitía mucha libertad. Ellos cubrían los gastos básicos con la publicidad y nosotros poníamos el contenido que se nos daba la gana. La libertad editorial que tuvimos entonces nos permitió realizar un experimento poco frecuente en este país, es decir, una revista independiente funcionando con todas las posibilidades periodísticas y sin las presiones típicas del mercado. Encima, llegamos a formar un grupo de gente muy piola, con un espíritu muy afín y un entusiasmo difícil de empardar..."

Amante y profesional de la historia, la literatura y la filosofía: ¿Cuál de tus obras preferís hoy?


ree
"...De las escritas, siempre la última. 'La Hinchada Caballerosa' es una colección de cuentos de todas las épocas; sirve también como un muestrario de mis intereses literarios. Hay una segunda parte que en algún momento me gustaría editar. Quién sabe, ojalá que pronto, cuando pase todo este bajón..."





¿Hay alguna entrevista/ trabajo que recuerdes con especial cariño?

"...Muchas, infinidad. Te dejo una anécdota con Ronnie James Dio que reviví hace poco porque me la pidieron de un diario de Ecuador...

...Allá por fines de 1997 en el mítico Estadio Obras Sanitarias de Buenos Aires tuvo lugar un evento repartido en dos días con un cartel extraordinario que incluía a Bruce Dickinson, Jason Bonham, Scorpions y DIO. Varias anécdotas memorables quedaron de aquellas fechas, entre ellas una insólita zapada nocturna en el Hard Rock Café donde los músicos de todas las bandas se combinaron para recrear temas de Los Beatles, charlar y divertirse hasta altas horas.

Sin embargo, la que voy a contar ahora fue más personal. Teníamos un reportaje pactado de antemano con Ronnie en el Hotel Intercontinental para la Revista Epopeya y acudimos mi amigo Sergio Choren (fanático de Deep Purple y de su saga) y un servidor. Ya habíamos hecho contacto con él en anteriores visitas y entrevistas como periodistas y como fans, pero esta vez resultó algo distinta. Al terminar la última pregunta y apagar el grabador, Dio le comentó a Sergio que estaba un poco contrariado porque no tenía en aquel momento en Argentina una compañía discográfica que lo representara y por ende no podía llevar a cabo una conferencia de prensa como a él le hubiese gustado. Sergio, ni corto ni perezoso, le propuso organizar una a contrarreloj para el día siguiente. Llamamos a todos los contactos de prensa que pudimos, sobre todo a los medios más subterráneos y metaleros (que sabíamos que no nos iban a fallar) y los convocamos para la tarde antes del show en un salón asignado por el hotel. Sergio se encargó de la logística y yo de la traducción en vivo. Todo salió ordenada y exitosamente, con la oportunidad incluida de poderse hacer fotos con Ronnie y una firma de autógrafos improvisada.

Ya se estaba desconcentrando del todo la gente del salón, apenas quedábamos unos pocos y el entorno de la banda, y entonces se nos aproxima un mánager del hotel a Sergio y a mí y nos dice enfáticamente que tenemos que retirarnos de ahí como el resto del público. En ese momento, Ronnie se abre paso entre nosotros dos, nos posa las manos en los hombros como si en vez de su estatura real midiera el doble y encara al sujeto con estas palabras: "¡No se meta usted con mis muchachos!"

De golpe se había convertido en El Padrino, y nosotros éramos "sus muchachos". El mánager se puso blanco, pidió disculpas y desapareció.

La mera evocación me hace lagrimear. Siempre voy a conservar un recuerdo maravilloso del gran Ronnie James Dio, no sólo admiración como músico, sino ante todo como persona, más allá de las anécdotas vividas. Era un grande de verdad, y lo confirmaba con cada acción..."

La Hora Clandestina

ree
"...La Hora Clandestina es una suerte de programa unipersonal que inicié con Emiliano Obregón en su Virtual Estudio. Producido, presentado y sobre todo musicalizado por mí. El eje temático es el Tiempo, como categoría filosófica, y allí hablamos de literatura, arqueología, historia, mitología, pero sobre todo música. Al principio el concepto no era muy claro, pero a partir de la segunda temporada, cuando empezamos a salir a través de la radio de Mariskalrock en España, la duración del programa fue de una hora clavada y de alguna manera para mí fue un reto poner todo el material en apenas sesenta minutos. Por suerte, los resultados fueron muy buenos. Lástima que ahora el programa está en un parate porque no se puede acceder a los estudios hasta que termine la pandemia..."

¿Estás contento con la repercusión que está teniendo Margaritas Para Gourmet? ¿Cómo presentarías este nuevo ciclo a los lectores de Pelotas?

"...Muy contento. No esperaba que la reacción fuera tan buena. Es mi primer ciclo en el formato puro de Internet y por suerte cuento con la edición de Charlie Pérez (quien fuera el primer director artístico de MuchMusic en Argentina) que les saca el mejor partido posible a las imágenes.
ree
Hablo de música, filología, historia, mitología, literatura pero peleamos todo el tiempo contra la censura y las restricciones de copyright que se manejan en YouTube. Esto nos limita muchísimo, sobre todo en la parte musical, pero aun así lo estamos llevando adelante..."

Ostracismo cuarentenal

"...Esto es una catástrofe, y como catástrofe hay que tratar de sobrevivirla. No le encuentro nada de positivo, lo poco de bueno que se puede sacar de ello se da únicamente porque todo podría ser peor. El contacto nos hace humanos, es una de nuestras características más puras. Sin contacto, vivimos mutilados. Si de algo sirve esta lección, es para que en el futuro se invierta lo que haya que invertir en salud, en desarrollar al máximo la medicina y en controlar potenciales enfermedades..."

-Gracias por la entrevista, ante todo, y que la llama interior siga creciendo a la altura de los sueños. Metal is forever!

Gracias a vos César por tu excelente predisposición. Este espacio es para vos.

MARGARITAS PARA GOURMET: www.youtube.com/user/cfr939

Comentarios


bottom of page